“El SUEÑO QUE HACE SOÑAR”

De acuerdo al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), 8, 007,014 personas han cruzado las fronteras de Ucrania, huyendo  de la guerra hacia a otros países, siendo Polonia la nación que - a decir verdad-  ha recibido el mayor número de personas que buscan refugio: un total de 4,146, 144, de los cuales sólo 1,180,677 están formalmente registrados como refugiados.

La mayoría de los que llegan son mujeres y niños, ya que a todos los hombres entre 18 y 60 años de edad, tienen la obligación de permanecer en Ucrania, para defender a su país; si bien Rusia ha derrotado a la resistencia y tropas ucraniana en la Zona de Severodonetsk del Dombás, y debido al gran daño que se ha provocado ahí sería imposible rehacer las ciudades en corto tiempo.

Hace unos días, se ha ordenado a las tropas ucranianas retirarse, lo que pone al alcance de los invasores a Lysychansk, con lo que podrían, por desgracia, dominar totalmente la región del Lugansk. Mientras tanto el apoyo mundial prosigue, y se aceleró la admisión a la OTAN de Ucrania, sin embargo condicionando su adhesión a los muchos requisitos que parecen imposible de cubrir sin ayuda exterior, cuando se teme que 90% de los ucranianos puedan considerarse ahora, en la situación de pobreza extrema.

Mas los puertos maritimos, desde donde se distribuyen los alimentos de la agroindustria ucraniana al mundo, ahora  son controlados por los invasores, por lo que se prevé una hambruna muy grave a nivel mundial.Y mientras, la población Ucraniana, no cuenta con esos alimentos, ni servicios básicos, muchos se empeñan en introducir armas a Ucrania, y ¿Qué pasa con favorecer una mejor ayuda humanitaria y de servicios de salud?, además en diversos lugares del 80% al 90% de la edificaciones e infraestructura  están dañadas y se considera que deberán ser derribadas. Así se ha expuesto a muchísimos peligros a la gran mayoría de la población civil desplazada, bajo pretexto de atacar sitios militares estratégicos, muchos quieren reconstruir ya, pero los rusos siguen avanzando (Fuentes ACNUR, UE y ANS).

Desde otra perspectiva y otros frentes, en Polonia, se ha procurado  crear para los refugiados, entornos de serenidad, entretenimiento, belleza, riqueza cultural y artística, que representan  para muchos de los desplazado, medios para sanar y sobrellevar esta enorme crisis.

Se trata de ambientes serenos y/o festivos como lo es el Festival ‘Sin Fronteras’ en la ciudad de Różanystok, un evento anual promovido por los Salesianos, su más reciente edición reunió a jóvenes de diferentes países. Allí, además de los espectáculos se realizan cada día muchas actividades creativas, incluidos diferentes talleres, a través de los cuales los animadores transmitieron sus habilidades, a un gran número de nuevos y entusiastas aprendices, que se empeñan en encontrar el rostro amable de Jesús y Don Bosco, en la vida cotidiana, ayudados y tomados de la mano de María: canto, acrobacias, artes escénicas, percusión, malabares en todas sus formas, mímica, teatro de marionetas, beat boxing, rap y break dance.

Han llegado a participar un total de 300 personas, incluidos 60 chicos y jóvenes ucranianos. Muchos de ellos narraron sus sufrimientos, peligros y situaciones de vida, pero también sus esperanzas y más profundos anhelos. También los voluntarios que les atienden, han testimoniado como los elementos festivos, les ayudan a reubicarse, a lograr adaptarse a una realidad por demás extraordinaria, de ahí de la relevancia de la intervención educativa pastoral, lo que hace de estos festivales un espacio humanizador y de oportunidades infinitas, que permiten la expresión de los chicos y chicas ucranianos, por lo que constituye un social y/o entorno adecuado, en donde ellos puedan ser escuchados.

Cabe destacar, que las organizaciones benéficas polacas, incluidas las salesianas, trabajan en coordinación con los gobiernos locales y el central, quienes se ocupan de ellos, proporcionan alojamiento, escuelas o guardería para los niños, un trabajo para algunas madres y 100 euros al mes para cada niño ucraniano… no obstante ellos hablan con la nostalgia de sus casas y familias y es necesario abrir espacios de expresión. Otro dato es que hacia septiembre, iniciará el próximo ciclo escolar, y cerca de 600 mil los alumnos ucranianos, estudiarán en escuelas polacas incluidas las salesianas.

Las afectaciones de esta guerra llegarán a perturbar económica y alimentariamente al mundo entero, pues Ucrania era uno de los “graneros” de la mundo, y ahora su producción de granos está estancada, sin poder salir de ese país, por lo que la acción salesiana en muchos otras regiones, es y será relevante para muchas otras personas que serán afectadas directa e indirectamente por este conflicto bélico, pero Don Bosco estará ahí en sus salesianos y Familia Salesiana, con una acción pastoral-educativa y humanitaria cristiana, de modo que logren, mediante esos elementos, el ser más resilientes a las condiciones adversas.