El pasado domingo 22 de octubre se conmemoró el 75º aniversario de la pascua del Siervo de Dios el Cardenal salesiano Augusto Hlond, primado de Polonia, fundador de la Sociedad de Cristo para los Emigrantes Polacos. En su país natal tuvieron lugar diversas iniciativas festivas y conmemoraciones en lugares relacionados a su vida, ministerio y apostolado.
La noche del 22 una gran asamblea se congregó para orar como comunidad en la Catedral de San Juan - lugar donde descansa el cuerpo del Cardenal Hlond-, acto que presidió S. E. el Cardenal Kazimierz Nycz, Arzobispo de Varsovia.
En Gniezno, lugar donde se conserva el corazón del Primado, los miembros de la Sociedad de Cristo participaron en la solemne Eucaristía presidida por Monseñor Wojciech Polak, Arzobispo local y Primado de Polonia. La homilía estuvo a cargo del Rev. padre Krzysztof Olejnik, Superior General de la Sociedad de Cristo, recordó los méritos del servicio pastoral del cardenal Hlond: la promoción del apostolado de los laicos en la vida de la Iglesia y el compromiso en la formación de la conciencia moral de los fieles. En su memoria litúrgica, se trajo a la memoria a San Juan Pablo II, en cuyo pontificado se concretaron las palabra que Hlod pronunció antes de fallecer: “Luchen bajo la protección de la Santísima Virgen María. La victoria, cuando llegue, será la victoria de la Madre Santísima”.
En Brzęczkowice, lugar donde nació el Cardena Hlond, S.E.R. Monseñor Grzegorz Olszowski, Obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Katowice, presidió un momento significativo de oración en memoria del Siervo de Dios.
El 21 de octubre, en la parroquia de San Juan Bosco en Szczecin, los Salesianos en ocasión de una reunión de formación de los Celadores del Rosario Viviente, conmemoraron a Cardenal Augusto Hlond mediante una solemne Misa que presidió S. Ex. Mons. Andrzej Dzięga, Arzobispo de Szczecin-Kamień.
La homilía estuvo a cargo de S.E. Mons. Henryk Wejman, Obispo auxiliar de la Arquidiócesis, quien destacó la contribución de Hlond en la construcción de las estructuras pastorales de las regiones de Óder y el Mar Báltico, lugares que él siervo de Dios visitó en octubre de 1947, haciendo caso omiso a los agravios de las autoridades estatales.
Mons. Wejman además subrayó la gran devoción e inspiración mariana en la acción pastoral de Hlond, enfatizó la extraordinaria y profunda habilidad que poseía para interpretar los signos de los tiempos: “A través del esfuerzo, el dolor, la humillación, la sangre y la santidad de la Iglesia, nos dirigimos hacia uno de los más grandes triunfos de Cristo”.
Mas tarde se celebró un simposio para actualizar el testimonio del Venerable Augusto Hlond cuyas conferencias fueron:
1) ‘En la escuela espiritual del primado Augusto Hlond: el arzobispo metropolitano Antoni Baraniak SDB’ a cargo del padre Jarosław 2) ‘El Primado del Milenio (Cardenal Stefan Wyszyński), heredero espiritual de sus predecesores Wąsowicz, SDB’ que presento Jan Łopuszański
Por su parte el padre Bogusław Kozioł, SChr, vicepostulador, dio a conocer el progreso del proceso de beatificación y exhortó a orar a favor del Cardenal Hlond.