Don Bosco no sólo es padre de soñadores sino que con su influencia suscita otros soñadores en la Iglesia, y testigo insigne y protagónico de esto ha sido el Cardenal Ángel Fernández Artime, 10º Sucesor del Padre de la juventud quien, como parte de su visita de animación a la inspectoría Brasil-Recife (BRE), el 3 febrero pasado, participó de la consagración de la Iglesia de Nuestro Señor Buen Jesús en Juazeiro do Norte, estado de Ceará, en el ‘Horto’ (Jardín) del Siervo de Dios padre Cícero Romão Batista, ubicado dentro de obra la salesiana.
Tras más de 2 décadas, el sueño del padre Cícero se hizo realidad, teniendo como testigos a: S.E.R. Mons. Magnus Henrique Lopes Obispo diocesano de Crato; S.E. Cardenal Fernández; el Rev. padre Francisco Inácio Vieira Júnior Superior de BRE, y de numerosos sacerdotes, seminaristas, religiosos y laicos miembros de la FS.
Al las 6 pm inició la celebración, presidida por Mons. Henrique. Durante el rito de consagración se realizó la bendición del agua y la aspersión. Tras la Liturgia de la Palabra, rezaron las letanías y se dispusieron reliquias de San Juan Bosco, San Domingo Savio y la Beata Benigna Cardoso. El altar y las muros de la iglesia fueron ungidos e incensados. Al final se ilumino la iglesia.
Posteriormente y después de la santa Comunión, fue inaugurada la Capilla del Santísimo Sacramento. Rector Mayor hiz uso de la palabra, para dar lectura a la Declaración póstuma como Salesiano Cooperador del Siervo de Dios padre Cícero Romão Batista: ‘Yo, Rector Mayor de la Congregación Salesiana, Cardenal Ángel Fernández Artime, en mi servicio y en nombre de Don Bosco, padre de la Familia Salesiana, inscribo entre los Salesianos Cooperadores, a título de Cooperador Póstumo, al padre Cícero Romão Batista, 'Padim Ciço'‘, ante esto la asamblea entera estalló en júbilo.
El Inspector de BRE, agradeció al Obispo de la Diócesis de Crato, al Rector Mayor y a las familias de los primeros arquitectos del templo por la obra largamente soñada y finalmente realizada, un sueño del padre Cícero hecho realidad. El Superior comentó: El evento de hoy es importante, pero nuestra misión aún no ha terminado...Sí, querido padre, aún debemos terminar las puertas, algunos espacios simbólicos y la Capilla del Santísimo Sacramento. Mientras tanto, junto con la Iglesia local, unidos en el mismo espíritu, continuaremos ofreciendo a los peregrinos los servicios sacramentales, el consuelo de las confesiones, cuidaremos del espacio verde preservado, fomentaremos los encuentros de comunión y santidad’.
Tras la revelación de la placa conmemorativa de aquella jornada, fuegos artificiales y un bello concierto finalizó este histórico suceso.